Hoy he rescatado de mi estantería la “libreta-diario” del 2008/9 donde apunté mis propósitos y la cosas inspiradoras del día a día..
Cogiendo cómo metáfora un árbol, los propósitos son las Ramas y el SER es la Raíz.
Si hacemos propósitos son para nutrir nuestro bienestar. Para recoger los frutos, primero plantamos la semilla, luego abonamos la tierra y la regamos para nutrir las raíces y así permitir que el árbol crezca. Los frutos del AMOR cuando me amo- me cuido a mi misma.
La libreta está llena de escritos, imágenes bonitas y citas de libros que me inspiraban por aquellos días.
En la cuarta página está escrito este poema tan inspirador y verdadero que hoy quiero compartir aquí:
“…De la semilla crece una raíz, después un brote; del brote, las hojas de la plántula; de las hojas, el pedúnculo; alrededor de éste, las ramas; arriba del todo, la flor… No podemos decir que la semilla causa el crecimiento, ni que tan siquiera el suelo lo haga. Podemos decir que las potencialidades del crecimiento residen en la semilla, en las fuerzas misteriosas de la vida, que, cuando se favorecen adecuadamente, toman determinadas formas…”
Centering in Pottery,
Poetry and the Person
M. C. RICHARDS
Extracto del libro: “Las diosas de cada mujer”
Una nueva psicología femenina.
Ed. Kairós
A menudo propongo el trabajo de raíz-periné en todos los grupos de mujeres.
Cuando una está en presencia encuentra sus respuestas: en el camino de la maternidad hay etapas de dudas, nutrirse desde la raíz es nuestra responsabilidad para encontrar nuestras respuestas y estar en nuestro lugar. Nutrir tu raíz te lleva a la confianza en la Vida y en ti misma, desde allí podemos tomar decisiones y acompañar a nuestros hijos mientras crecen, nos empoderarnos.
Un ejemplo: hay mujeres embarazadas que como doula me preguntan si yo les podré decir en el parto el mejor momento para ir al Hospital, es una de las dudas más frecuentes, ¿cuando ir? la respuesta la tiene la mujer embarazada, si está conectada con su cuerpo, si previamente se ha nutrido desde la raíz, escuchado atentamente, sabrá cual es su momento, y ese es el mejor momento para ella. Ni más tarde ni antes de tiempo. Quizás la mente había planeado ir muy avanzada la dilatación, o solo comenzar, o … pero al final, si no eres comadrona, no sabes exactamente en que punto estás, y da igual, porque estás en tu camino, esto solo lo puedes escuchar del cuerpo y en el momento presente, no lo puedes planear. Pero puedes escuchar tu confianza para que te hable el día del parto, nutrirte durante el embarazo para estar fuerte, enraizada en la Tierra y tomar decisiones desde tu lugar.
Anna Santos